Soñábamos con un ambicioso Sáhara en el Corazón III en Madrid. En el fondo sabíamos que superaba nuestras limitadas posibilidades.
Sin embargo, algo se estaba cociendo en los estudios de la calle Núñez de Arce, el CD de Leyoad. Y ahora, revisando las cintas de vídeo que sistemáticamente grababa de cada concierto, reconozco que, de alguna manera, eran lugares ideales para probar temas que estaban sobre el tapete.
Una muy buena muestra fue el concierto ofrecido en la sala Clamores Jazz, en primavera, con la misma formación que actuó en Rock por el Sáhara. Por eso, para iluminar este año 2001, selecciono cuatro perlas de aquella actuación, que con mayor placer repaso una y otra vez. Los tres bailes que Toufa se marcó, y una de las canciones que llamó mi atención en mi primer contacto con la música en los campamentos, el festival de Auserd, en octubre de 1997.
Sentados todos los músicos, a la manera tradicional, en el suelo del escenario, empezó Nayim templando la gama con la guitarra. Mahfud, con una voz un tanto ronca, introdujo la canción con un mawal imponente. El poeta Zaim, sentado junto a Nayim, su hermano, sostenía unos folios con los versos de “Viva el Polisario”, obra que había compuesto para la ocasión, de modo que Nayim pudiera seguir bien la letra y no se liara, pues era un riguroso estreno.
Cuatro años más tarde, en Clamores, asistimos a una versión más desenfadada. Mariem ocupa el lugar de Mahfud y ejerce, además, de animadora. Nayim, que cuenta con el apoyo de Perico (Emboiric) a la guitarra, domina por completo la situación con unos solos de antología. Todos, en el escenario, están muy compenetrados. Toufa suelta algún que otro zagarit larguísimo. Tarba, detrás, dándole leña al tebal, se lo pasa en grande desde su posición privilegiada.
Poco puedo decir de los bailes de Toufa: Bleida, Charaa y Serbat. Me quedo boquiabierto contemplando cómo lleva el ritmo. Con qué gracia y naturalidad gesticula manos y dedos. ¡Gracias, Toufa, por esta clase magistral de baile saharaui! Quienes quieran iniciarse ya tienen donde acudir.
¡Que lo disfrutéis!
Manuel Domínguez